lunes, febrero 26, 2007

DESARROLLA IPN MOLÉCULAS PARA GENERAR NUEVOS FÁRMACOS CONTRA EL ALZHEIMER

• Las moléculas constituyen una alternativa viable para la generación de fármacos menos tóxicos, más eficientes y de bajo costo

• Por la aportación que representa esta investigación científica única a nivel mundial, los investigadores del IPN iniciarán los trámites para obtener la patente internacional de las moléculas

• En México no se cuenta con datos precisos acerca del número de enfermos con Alzheimer, pero se estima que existen más de 350 mil, aseguró la científica Judith Espinosa Raya

Investigadores del Instituto Politécnico Nacional desarrollaron nuevas moléculas para la generación de fármacos menos tóxicos, más eficientes y de bajo costo, que coadyuven al tratamiento de la enfermedad de Alzheimer en su etapa inicial, a fin de retardar su evolución y mejorar la calidad de vida de las personas que presentan este padecimiento, caracterizado por la pérdida paulatina de la memoria.

El doctor José Guadalupe Trujillo Ferrara es el titular del proyecto que se realiza desde hace más de una década en la Escuela Superior de Medicina del IPN, y bajo esta línea de investigación se han formado especialistas de alto nivel, como es el caso de la doctora Judith Espinosa Raya, quien actualmente evalúa la acción favorable de las nuevas moléculas que representan una alternativa viable para contrarrestar las enzimas que dañan los procesos de memoria y aprendizaje.

“Actualmente, evaluamos la acción colinérgica y la toxicidad de dos moléculas que evitan la hidrólisis de uno de los neurotransmisores más importantes del sistema nervioso central denominado acetilcolina, el cual interviene en los procesos de memoria y aprendizaje”, acotó.

Espinosa Raya indicó que como parte de la investigación que le permitió obtener el grado de doctora en ciencias, diseñó y sintetizó un grupo de 12 moléculas que se evaluaron en el laboratorio y modelos animales, y de ese total dos moléculas registraron mayor capacidad para inhibir la acción de la enzima “colinesterasa” que degrada o hidroliza la acetilcolina.

La investigadora politécnica explicó que de acuerdo con las pruebas realizadas, se observó que ambas moléculas no sólo bloquean la acción de la enzima que afecta al neurotransmisor, sino que además favorecen los procesos de memoria y aprendizaje.

“El aspecto más importante de este proyecto es lograr que las moléculas simulen la acción del neurotransmisor y de ese modo retrasen la evolución de la enfermedad en pacientes que presentan bajos niveles de acetilcolina”, afirmó.

La investigadora politécnica subrayó que por la aportación que representa esta investigación científica única a nivel mundial, se iniciarán los trámites para obtener la patente internacional de las moléculas diseñadas en el IPN.

“La manipulación farmacológica del sistema colinérgico, puede ser una estrategia terapéutica para esta enfermedad, toda vez que las moléculas que se desarrollan en el Politécnico son similares a la acetilcolina y generan pocos efectos secundarios, además de que se está utilizando materia prima de bajo costo, con el propósito de generar fármacos con un precio accesible”, subrayó.

La doctora Espinosa Raya refirió que aunque en México no se cuenta con datos precisos acerca del número de enfermos con Alzheimer, se estima que existen 350 mil. Explicó que el Alzheimer es una enfermedad difícil de diagnosticar y en muchas ocasiones los médicos la confunden con depresión o demencia senil.

”En México no existe un registro preciso de las personas con esta enfermedad, toda vez que gran parte de ellas desconocen que tienen el padecimiento y esos casos no se reportan; es necesario buscar nuevos medicamentos contra el Alzheimer, ya que en los próximos años aumentará la población de la tercera edad en México y será ineludible procurarles una mejor atención”, advirtió.

La doctora en farmacología explicó que el proceso de diseño de moléculas químicas es altamente complicado, ya que primero se genera una representación en la computadora (modelaje molecular) y posteriormente se simula el mecanismo de acción, para finalmente corroborar el efecto en el laboratorio.

Indicó que “se han hecho evaluaciones poniendo en contacto las moléculas químicas con receptores colinérgicos (en laboratorio) y con ratas y ratones (in vivo), a los que se administra un fármaco que les produce pérdida de memoria y después se les inyecta el fármaco análogo al neurotransmisor y se realizan pruebas de aprendizaje, con las que se comprueba el restablecimiento de la memoria”.

La especialista de la ESM informó que los resultados de esta investigación se han presentado en 18 congresos nacionales y cuatro congresos internacionales, y han permitido contar con cinco publicaciones internacionales.

La doctora Judith Espinosa dijo que el siguiente paso será acercarse a la industria químico-farmacéutica y convencer a los empresarios de las bondades que conlleva utilizar estas moléculas para la generación de fármacos que no provocan intoxicación celular.

La investigadora de la Escuela Superior de Medicina comentó que por el deterioro neuronal se provoca un desequilibrio en el sistema neuronal, por lo que el Alzheimer inicia con pensamientos confusos, pérdida de la memoria reciente y una exacerbación de la memoria lejana. “Los enfermos paulatinamente dejan de ser autosuficientes y se les olvida cómo se realizan funciones vitales (comer, dormir y controlar esfínteres)”, afirmó.

Refirió que hasta ahora no se conoce algún elemento que sea determinante para desarrollar el Alzheimer, toda vez que la enfermedad es multifactorial, pero se ha comprobado que las personas que se mantienen intelectualmente activas tienen menor posibilidad de padecerla, por lo que recomendó el hábito de la lectura y practicar juegos de agilidad mental como: ajedrez, rompecabezas y crucigramas, entre otros.

El diseño racional de fármacos –señaló- requiere de una base sólida de conocimientos bioquímicos y de bioquímica computacional, de manera que no es sencillo establecer un equipo de trabajo que abarque todos esos campos.

Finalmente, Espinosa Raya sostuvo que gracias a las bases que ha sentado el doctor Trujillo Ferrara en el Politécnico, ahora es posible que se constituya una línea de investigación de química medicinal, rama que aún es incipiente en México